¿Cómo elegir un buen cemento para tu construcción?

¿Qué sería de la construcción sin el cemento? En países como el nuestro, el precio del cemento es realmente barato y además es muy fácil de conseguir para cualquier tipo de obra, por eso es uno de los materiales de construcción más importantes y populares. Pero, ¿sabías que existen diferentes tipos dependiendo de sus características?

Diferencias entre cemento gris y cemento blanco

Para construcciones donde se requiere un acabado pulido, el cemento blanco es el ideal, gracias a su resistencia y a su facilidad para aplicaciones estructurales y decorativas. 

El cemento gris es para un uso más general en la obra y talachas, otorgando una gran resistencia. 

Tipos de cemento

En cada obra que está por realizarse, el Project Manager debe considerar qué tipo de cemento utilizar en la construcción. A pesar de que existan varios tipos de cemento, comúnmente se utiliza el Tipo I y II.

Tipo I

Es el cemento de uso general, en construcciones de concreto y trabajos de albañilería. Aplicaciones: concreto en clima frío, pavimentos, cimentaciones, adhesión, etc.

Tipo II

Moderada resistencia a los sulfatos. Es usado en obras de concreto en general y obras expuestas moderadamente a sulfatos, o donde se requiera moderado calor de hidratación. Aplicaciones: puentes, tuberías de concreto, etc.

Tipo III

Este cemento se caracteriza por su rápida resistencia desde el inicio de la aplicación. Al cuajar, produce alto calor, por lo que es aplicable en climas fríos.

Tipo IV

Se requiere bajo calor de hidratación en que no deben producirse dilataciones durante el fraguado. Aplicación: presas.

Tipo V

Tiene una alta resistencia a las sales, recomendable su uso cuando esté en contacto con agua o en un ambiente salino. Aplicaciones: canales, alcantarillas, ácidos y/o aguas subterráneas, obras portuarias, albercas o acueductos.

En la parte posterior de cada bolsa de cemento están las características e ingredientes, ten en cuenta que lo más recomendable es comprar el cemento hasta dos semanas de anticipación. Cubre las bolsas con una lona para protegerlos de la humedad y evitar que pierdan sus propiedades.